sábado, 28 de enero de 2006

De las “ETT’s” al “Estatut”.

El otro día, mi jefe lo redujo todo a una expresión: “… tu rendimiento está bajando …”.

Y me dije, Dios mío, ¿cuantos serán los trabajadores, cuyo rendimiento está descendiendo en este momento?, ¿y cuantos los jefes descontentos, sin sus medallas?,
¡ que catástrofe ! .

Es mucha la rapiña que se cierne, sobre un caldo de cultivo cada vez menos favorable a los empleados, los trabajadores que son en definitiva quienes mueven el barco, la verdadera riqueza productiva de un país, los pertenecientes al último eslabón de la cadena.

En una evolución histórica las empresas han pasado de contratar a “flexibilizar”, al “outsourcing”, término patético, de la pedantería contemporánea, que significa hacer externas a las personas, ¡ ops ¡, perdón quise decir “recursos”.

A todos estos garbanzos hay que añadir los fideos: empresas de trabajo temporal, empresas de servicio, partes de horas duplicados, promesas incumplidas y una falsa preocupación por el estado del empleado, al que marean cambiando de subcontrata las “grandes” corporaciones. Todo ello en un fascinante cocido, que sólo se comen los “privilegiados”, que desde su gran despacho en la última planta de alguna torre observan a las “hormiguitas” moverse de un lado a otro en metro, o en autobús.

Muchos son los interrogantes sobre la olla política que contiene esta comida, cuyo contenido, según algunos, está a punto de estallar por la crispación, y según otros a punto de servirse en la mesa como deuda histórica.

Señores políticos, por favor, no hagan demagogia. Pues casi ninguno de ustedes se opuso a la existencia de las empresas de servicio, a las empresas de trabajo temporal ó a las empresas de contratos basura, en definitiva. Y aquel asunto, si que influyó finalmente en la vida de los españoles, tanto o más que el “Estatut”, coartando muchos de nuestros derechos, y nuestra libertad a la hora de protestar, por las injusticias laborales de alguien que nos dice: “… tu rendimiento está bajando …”, en una crisis de amnesia temporal.

Buenas noches y buena suerte.


Ablogator